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Diseñadores mexicanos se suman a la lucha vs COVID-19 

Foto: gettyimages

La pandemia no sólo alertó a los sectores de salud y financieros, también llegó para dar un golpe a una industria que cambia constantemente en tiempo y espacio: la moda.

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Business of Fashion calcula que los ingresos de esta esfera se contraigan en un 30%; asimismo, se estima que alrededor del 76% de los emprendedores mexicanos quiebre.

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No obstante, los trazos de esperanza y las costuras de luz aparecen: no dejan de aportar de distintas formas.

 

Ante esta situación son varias marcas mexicanas, diseñadores, fabricantes y más personas que forman parte de la industria están uniendo esfuerzos para darle vuelta a la pandemia con lo mejor que saben hacer: moda.

Foto: Instagram Vero Díaz

Recientemente el diseñador Benito Santos, junto con otros cuatro artistas tapatíos, fundaron Nudos x México, iniciativa enfocada en crear pañuelos, cuyas ganancias irán destinadas a donar equipos de protección al personal médico.

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Estrategia similar que puso en práctica la diseñadora Lorena Saravia, quien junto con su equipo crearon dos playeras que llevan impresas las leyendas “México querido” y “México mi amor”. El 100% de las ganancias obtenidas serán destinadas para adquirir insumos médicos para hospitales que están en batalla con el COVID-19.

Foto: Lorena Saravia

Con el objetivo de vestir de amor a México, Vero Díaz, diseñadora oriunda de Yucatán, también se enlistó a los creativos de la moda que buscan dar batalla frente al coronavirus.

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Creó una colección de t-shirts inspirada en el amor, de las cuales el 50% del dinero recaudado será destinado a la adquisición de material para la Fundación por la Salud en Yucatán.

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Otros diseñadores nacionales se han sumado con distintos proyectos, pero con un mismo objetivo: ayudar.

Carla Fernández está dirigiendo sus esfuerzos para la creación de cubrebocas reusables de algodón, de la mano de artesanos de varias partes de la República mexicana. 

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Estas mascarillas faciales tienen un diseño que evoca a la cultura mexicana con toques contemporáneos. El 25% de las ventas se van directo al artista que diseñó los estampados de los tapabocas.

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Foto: Instagram Carla Fernández

Por su parte, la diseñadora Raquel Orozco se unió desde su trinchera con la entrega de cubrebocas y equipo de protección a hospitales de distintos estados de la República Mexicana.

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La situación en la que estamos viendo también se ha convertido en una oportunidad para otros creativos del sector.

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A pesar de que la Fashion Week de otros países se canceló, México vio más allá para emigrar a lo digital. Se presentó la primera edición de la semana de la moda en YouTube, formato que permitió ver los desfiles en primera fila desde nuestras casas.

 

Esta nueva forma de ver la moda se convirtió en una oportunidad de comunicar y hacer negocios.

No queda duda de que la industria de la moda es testigo de los cambios y todos los que forman parte del sector tienen que adaptarse a ellos.

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Aún el escenario es incierto, pero una vez más se está demostrando la resiliencia que hay en el país: los mexicanos al grito del COVID-19.

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Es el momento perfecto no sólo de ayudar, también de analizar y reevaluar la industria de la moda para transformarla en una más responsable, sostenible y rentable.

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